En los mejores trabajos de Moruba se distingue un aire de entusiasmo, una exaltación optimista del diseño. Es la huella de la confianza, que para los integrantes del estudio, Daniel Morales y Javier Euba, es la auténtica clave del éxito de un proyecto. Una ilusión que se propaga al cliente y al mercado, y que se revela el motor para alcanzar soluciones llenas de sentido, también desde el punto de vista de la eficacia comercial.
Fundado en Logroño en 2008, Moruba ha conseguido numerosas menciones por sus proyectos de packaging. El estudio colabora con numerosas bodegas riojanas y de toda España, entre las que se encuentra Viña Zorzal Wines, para la que ha desarrollado la imagen gráfica y la línea de etiquetas. Señora de las Alturas es el vino icónico de la marca, y su etiqueta planteó varios retos creativos y técnicos, resueltos gracias a una estrecha colaboración entre el estudio y la imprenta.
¿Cómo se gesta la etiqueta de Señora de las Alturas? Todos los vinos de Viña Zorzal Wines muestran el pájaro en sus etiquetas, siempre en una posición estática muy reconocible. El cliente nos pidió mantener la imagen en el Señora de las Alturas, pero al mismo tiempo distinguirlo de alguna manera del resto de la gama. Se nos ocurrió mostrarlo en el aire, destacando el vuelo como la máxima expresión de un ave. El zorzal aparece silueteado pero, a modo de truco visual, lo “vaciamos”, de manera que parece que haya cobrado vida.
Con un buen resultado conceptual. Por supuesto, nos permite explicar los valores esenciales de la marca: la libertad, la energía, el impulso de un carácter decidido y diferente…
En ese juego visual, ¿qué aspecto técnico tiene mayor relevancia? El desmayado o perforado de la silueta. En vez de desmayarla en la etiquetadora de la bodega, como hubiera sido lo normal, la perforamos previamente, en la imprenta. Es decir, la bodega recibió las bobinas debidamente perforadas con la silueta del pájaro. Esto fue posible gracias a la extrema precisión de los utillajes de Vidal & Armadans.